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Desde el pasado lunes 6 de octubre, American Airlines implementó un cambio significativo en su política de embarque que afecta directamente a los pasajeros que viajan con equipaje de mano. Aunque la medida ha sido descrita como «silenciosa», su impacto es inmediato en todos los aeropuertos de Estados Unidos donde opera la aerolínea.
🔄 ¿Qué cambió exactamente?
American Airlines ha retirado los medidores de equipaje de mano que tradicionalmente se encontraban en las puertas de embarque. Estos dispositivos permitían verificar si las maletas cumplían con las dimensiones permitidas para ser llevadas en cabina. A partir de ahora, los pasajeros deberán realizar esta verificación en el vestíbulo del aeropuerto, antes de llegar a la puerta de embarque.
👀 ¿Quién decide si su maleta puede ir en cabina?
La responsabilidad recae ahora en los agentes de la aerolínea, quienes usarán su propio criterio para determinar si una maleta excede el tamaño permitido. En caso de duda, se favorecerá al cliente, pero si el equipaje es claramente demasiado grande, deberá ser despachado como equipaje facturado.
📏 Medidas que siguen vigentes
Aunque se eliminan los medidores en la puerta, las dimensiones permitidas para el equipaje de mano no han cambiado. Las maletas deben medir como máximo 22 x 14 x 9 pulgadas (56 x 36 x 23 cm), incluyendo asas y ruedas. Además, cada pasajero puede llevar un artículo personal que debe caber debajo del asiento delantero.
🧳 Consejos para evitar contratiempos
- Verifique el tamaño de su equipaje en el vestíbulo antes de dirigirse a la puerta de embarque.
- Etiquete sus artículos de mano por si deben ser facturados.
- Recuerde que algunos aeropuertos o aviones pueden tener restricciones adicionales.
👨👩👧 Otros cambios recientes
Esta medida se suma a otras iniciativas de American Airlines para agilizar el proceso de embarque, como el preembarque ampliado para familias con niños pequeños, que ahora cuentan con cinco minutos adicionales para abordar.
📌 Ojo aquí
Si bien la eliminación de los medidores en la puerta busca hacer más fluido el embarque, los pasajeros deben estar atentos a las dimensiones de su equipaje para evitar sorpresas de último momento. La clave está en la preparación: medir, verificar y etiquetar antes de llegar a la puerta.
