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Por La Hora del Sur
Santo Domingo, 23 de agosto de 2025
El parque vehicular dominicano superó los 6.1 millones de unidades registradas, pero solo el 34% cuenta con seguro de responsabilidad civil, conocido como seguro de ley. Esto significa que más de 3.9 millones de vehículos circulan sin respaldo legal ni financiero, en un país donde los accidentes de tránsito provocan entre 8 y 9 muertes diarias y más de 135,000 lesionados al año.
Franklin Glass, presidente de la Cámara Dominicana de Aseguradores y Reaseguradores (Cadoar), advierte que “moverse en este país es una actividad de alto riesgo”, y señala que la cobertura mínima actual —RD$30,000 por daños a terceros— no se ajusta a la realidad económica ni a los costos médicos vigentes.
📉 Un Seguro Obligatorio Que No Protege

Con una prima anual de apenas RD$1,200, el seguro obligatorio no cubre ni siquiera los gastos básicos de atención médica tras un accidente. Esta cifra permanece congelada desde hace más de una década, mientras los costos de reparación, hospitalización y litigio continúan en ascenso.
🔄 Propuestas de Reforma
Desde el sector asegurador se plantean medidas urgentes:
- Indexar las primas cada dos años, ajustándolas al costo de vida.
- Ampliar la cobertura mínima, incluyendo atención médica y daños materiales.
- Incentivar el cumplimiento mediante beneficios fiscales o descuentos en renovación de placas.
- Fortalecer campañas de concienciación, especialmente entre jóvenes conductores y en zonas de alta circulación.
🏛️ Impacto Institucional
La baja penetración del seguro vehicular afecta directamente a:
- El sistema judicial, saturado por litigios derivados de accidentes sin cobertura.
- El sector salud, que asume los costos de atención a víctimas sin respaldo financiero.
- Las aseguradoras, que enfrentan desafíos de rentabilidad y credibilidad.
🌐 Un Llamado a la Formalización
Reformar el seguro obligatorio no es solo una medida técnica, sino una apuesta por la protección ciudadana, la formalización del transporte y la estabilidad institucional. En un país donde el tránsito representa una de las principales causas de muerte, garantizar cobertura mínima para todos los vehículos es una deuda pendiente con la seguridad pública.