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El Vaticano ha difundido la primera fotografía del papa Francisco desde que fue hospitalizado por una neumonía doble. En la imagen, el pontífice de 88 años aparece en una silla de ruedas frente al altar de una capilla del hospital Gemelli, en Roma. La fotografía ha sido un alivio para los fieles alrededor del mundo, al mostrarlo sin necesidad de respiración asistida mientras continúa recibiendo tratamiento.
El papa Francisco ha descrito esta etapa como «un momento de prueba», destacando tanto su vulnerabilidad como su fe inquebrantable. En un mensaje a través del Vaticano, agradeció las oraciones y el apoyo constante de la comunidad, instando a todos a mantener la esperanza.
Aunque su recuperación avanza lentamente, los médicos han señalado mejoras progresivas en su estado de salud. Sin embargo, sigue bajo estricta supervisión médica, y su agenda pública permanecerá suspendida hasta que pueda reanudar sus actividades con plena seguridad.
La imagen del papa rezando en la capilla del hospital simboliza no solo el peso de su responsabilidad espiritual, sino también la lucha personal que enfrenta como líder religioso y ser humano.
«En momentos de adversidad, la oración y el apoyo mutuo son nuestro consuelo», reflexionó el papa en su mensaje.
Los fieles y líderes religiosos de todo el mundo han respondido con mensajes de apoyo y solidaridad, reconociendo que la salud del Santo Padre es un tema central en la vida de la Iglesia Católica.
Desde su elección en 2013, el papa Francisco ha sido conocido por su cercanía con las personas, especialmente con quienes atraviesan momentos difíciles. Hoy, su propia batalla contra la enfermedad resuena como un recordatorio de la fragilidad y fortaleza humanas.
