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En un esfuerzo por proteger la producción nacional de arroz ante los efectos del Tratado de Libre Comercio con Centroamérica, República Dominicana y Estados Unidos (DR-CAFTA), el gobierno dominicano ha emitido el Decreto 693-24. Esta medida busca mitigar el impacto que el tratado, que entrará en vigor en 2025, podría tener sobre los agricultores locales y la economía nacional.
El decreto establece una cuota de importación de 23,300 toneladas métricas de arroz originarias de Estados Unidos, las cuales estarán libres de aranceles. Sin embargo, cualquier importación adicional fuera de esta cuota será gravada con un arancel del 99% ad valorem, una medida diseñada para desincentivar la importación excesiva y proteger la producción local.
Esta estrategia busca equilibrar los compromisos comerciales internacionales con la necesidad de preservar la seguridad alimentaria y el bienestar de los productores dominicanos. La implementación del Decreto 693-24 refleja el compromiso del gobierno con la protección de la agricultura nacional, un sector crucial para el desarrollo y la estabilidad del país.
El impacto del DR-CAFTA en la economía dominicana ha sido un tema de debate, con opiniones divididas sobre los beneficios y desafíos que presenta. Mientras algunos ven el tratado como una oportunidad para la modernización y el acceso a nuevos mercados, otros señalan los riesgos para los sectores agrícolas tradicionales.
La introducción de estas medidas arancelarias representa un paso crucial en la defensa de la producción de arroz, asegurando que los productores locales puedan competir en igualdad de condiciones y seguir contribuyendo a la economía y la seguridad alimentaria del país.
